domingo, 24 de julio de 2016

Rumanía, del 6 al 17 de julio de 2016

El artículo 84 del último Código Civil aprobado en Rumanía, que se promulgó tras la revolución de 1991, estableció que a los recién nacidos no se les pueden poner nombres ridículos o indecentes, u otros que vayan contra las buenas costumbres, contra el orden público o contra los intereses del bebé. Pese a la norma, en 2010 todavía se contabilizaban más de 600 desafortunados rumanos llamados Bounegru, Toro Negro. Nosotros llegamos a Bucarest un 6 de julio, precisamente huyendo de los toros negros que en estas fechas corren el encierro de nuestra gloriosa ciudad en unas fiestas que no tienen igual en el mundo entero, los Sanfermines de Pamplona.